Skip to main content

Coloquio de editores europeos: dilemas y encrucijadas culturales en Formentor

Octubre en Aranjuez, y no es casualidad. Que las Conversaciones Literarias de Formentor, ese santuario secularizado para la inteligencia, se trasladen del tramonto mallorquín a los jardines donde Godoy compartía pasiones con la reina María Luisa es más que un capricho logístico: es el lugar adecuado para que editores de Finlandia, Suecia, Italia, Portugal, Francia, Alemania, Inglaterra, Suiza y España—nótese la música de la enumeración—acudan como si fueran cantantes de ópera a afinar las cuerdas vocales de la cultura impresa. De eso va el Coloquio de editores europeos, de cantar a varias voces, de poner en escena el drama perpetuo del libro, ese artefacto que, como el bel canto, sobrevive a sus muchas muertes anunciadas…